Obsesión

Obsesión

2.12.07

Pag. 312

Fantasma se preguntó si Nada estaría allí aquella noche. Todos los niños se parecían mucho a él. Sus largos impermeables oscuros o chaquetas de cuero demasiado grandes envolvían sus frágiles huesos como si fueran sombras. La gran mayoría parecían terriblemente pequeños y frágiles, como si fueran a romperse igual que burbujas de jabón en cuanto los tocaras, pero en todos aquellos ojos manchados de negro acechaba una cierta dureza, un muro de cristal que tenía como objeto ocultar su terrible vulnerabilidad. Demuéstrame lo que eres capaz de hacer, decían sus ojos. Hazme daño si te apetece. Lo he visto todo o creo haberlo visto todo, ¿y qué diferencia hay entre una cosa y otra?



- El alma del vampiro. Poppy Z. Brite -